viernes, 26 de enero de 2018

Promoción del libro

Foto tomada de https://majadahondamagazin.es/61300-61300

No, publicar no es el fin para un libro. Que la obra llegue a las manos del autor, que repose en la biblioteca personal. Que le diga al ego que se ha cumplido con un sueño. Que la familia, amigos y allegados sepan de la existencia de él. No, publicar es solo parte de un proceso complejo que se debe conocer.

Y es que un libro no existe si tras publicarse reposa en una bodega o en la biblioteca del autor, abandonado y sin lectores. Por eso, todo autor que bajo el respaldo de un sello editorial, entiende la importancia de la promoción y difusión de su obra, como parte del proceso para alcanzar su comercialización, sabe que la presentación, la reseña, la entrevista, la crítica, la mención de otros autores…es parte de la clave del éxito.

Así, un libro que aparece reseñado en un suplemento cultural, que es comentado en un blog o página web, que es criticado o sugerido desde las redes sociales de autores con seguidores, es un libro que avanza junto a un plan de comunicación. Por ello no es de extrañar que al autor lo entrevisten en medios de comunicación televisivos, radiales, de prensa; que en alguna revista digital se incluya un diálogo extenso sobre él y su obra. Todo, es parte de un fin que previamente se ha buscado.


Por lo tanto, la promoción del libro, es uno de los procesos más importantes después de la publicación: hacer que los posibles lectores sepan que existe una obra que podría ajustarse a sus gustos, y ser aquella parte que buscaban para conectar con un placer de la vida que es para elegidos: la lectura. 

jueves, 18 de enero de 2018

El autor amateur

Imagen tomada de https://es.123rf.com/ 

¿Cómo reconocer a un autor amateur? Muy sencillo: viendo la clase de libro que tiene. Y es que tanto nos hemos encontrado con las publicaciones de esta clase de autores, que logramos identificar algunas de las características de sus libros:

·         Títulos largos, aburridos y trillados.
·         Tiene un gusto por los colores que no siempre logran una armonía entre ellos.
·         Le encanta la tipografía que hace ruido en exceso.
·         Antepone a su nombre grados académicos.
·         Casi siempre aparece en la portada de su libro, como modelo.
·         Escribe sus propias contraportadas.
·         Encarga a sus amigos los textos de contraportada.
·         Su foto de solapa está mal tomada o pixelada.
·         Su biografía es exageradamente increíble.
·         Sus libros no tienen código de barras.
·         Están mal diagramados.
·         Se incluyen dedicatorias extensas y redundantes.

Por todo lo anterior un autor amateur existe porque decidió que la publicación de un libro es algo sencillo; que una imprenta podría resolverle el tema de la diagramación y diseño de portada en corto tiempo; que no era necesario corregir el texto, porque casi todos ellos fungen de genios que todo lo hacen a la perfección.


Así el autor amateur, orgulloso de verse en la portada de su libro, lo presenta, vende y recibe la acogida de sus amigos. Las redes sociales se saturan de cientos de felicitaciones. Pero al final del día, nadie, más allá de su círculo de amigos y familiares, sabe que existe como autor.

viernes, 12 de enero de 2018

Autor, editor y autor-editor

Fotograma del film "El autor". Tomada de https://www.elseptimoarte.net


Una de las confusiones más reiterativas en el ámbito de la edición (y que no necesariamente se dan dentro del círculo, sino más bien externamente) recae en la figura del autor, el editor y también esa fusión autor-editor. Tres figuras disímiles entre sí, que cumplen distintos roles.

Partamos diciendo que el autor es aquella persona responsable de la escritura (idea, criterio, posición) de un texto. Una figura a la que institutos como el IEPI reconocen como creador.

Por su parte el editor es aquel profesional encargado de trabajar con textos que proporciona un autor (o autores, al tratarse de obras colectivas). Dando recomendaciones de mejoría en cuanto a los elementos inherentes a la obra, sea esta académica o literaria.

Ahora bien, existe también la figura del autor-editor, aquel doble agente que escribe y se edita, el que respalda cada una de sus publicaciones, las avala, y es el responsable de cuanto se publica.

Esta práctica (la del autor-editor) no es la más recomendable de realizar, pero se da reiterativamente, sea por la ausencia de un editor y sello editorial que acoja la publicación y guíe adecuadamente al autor, o, contrariamente porque el autor no desea ajustar a las políticas editoriales que un sello ofrece.

En todo caso, las obras de autor-editor no suelen llegar muy lejos (con poquísimas excepciones) porque siempre se necesitará la mirada externa de un editor y del proceso editorial por el que debe pasar todo texto previa publicación y difusión.

lunes, 8 de enero de 2018

Importancia del ISBN


Tal vez, para quienes no estén familiarizados con la edición de libros, haya pasado desapercibido un código de barras que aparece, regularmente, en la contracubierta. Unas rayas verticales acompañadas de trece dígitos, cuyo tamaño depende del diseño que tenga la publicación.

Pues bien, resulta que este código de barras, ha sido clave en la visibilización de cada libro. Se trata del Número Estándar Internacional de Libros o en sus siglas en inglés ISBN. Un código que vendría a ser como la cédula de identidad de cada publicación no seriada.

¿Y cómo ayuda al autor y al libro? Primero que el registro otorga la calidad de autor (o compilador, editor…) al responsable de la publicación, asimismo el libro puede llegar a librerías, tanto las independientes como las grandes cadenas. Pero, lo más importante es que este registro da la posibilidad de que el autor pueda, en algún momento y esto si su obra destaca, ser invitado a ferias de libros, encuentros literarios o académicos, incluso llegara a ser ponente.


Por eso cuando haya decidido publicar un libro, no olvide que como paso previo a la impresión, debe hacer el registro y obtener un ISBN. En Ecuador el proceso es fácil y sencillo, y lo puede hacer usted mismo por internet, o si su obra sale bajo el respaldo de un sello editorial, ellos se encargarán de todo.